Adivina adivinanza; una señora muy enseñoreada, con el sombrero verde y la falda morada. Pues de ella vamos a hacer hoy el post, de la berenjena. La berenjena es una hortaliza muy versátil a la hora de cocinarla, pero a mí, la receta por excelencia es la berenjena rebozada.Antes de empezar, debo añadir queridos novatos que vamos a avanzar un nivel superior en el arte de la cocina. Los rebozados los clasificaría de nivel B1 -categoría de idiomas- así que a ponerse el delantal y seguir la receta a pie de letra.
LISTA DE LA COMPRA
1. Una berenjena
2. Harina
3. Huevos
4. Pan rallado
5. Sal
PASOS A SEGUIR
El primer paso para preparar berenjenas rebozadas deberá ser lavarlas bien y cortarlas en rodajas gruesas. A continuación, deberás poner las berenjenas en un recipiente con agua y sal durante una hora, para que suelten el exceso de agua y no amarguen. Si no tienes suficiente tiempo, también puedes optar por colocar las rodajas en un plato, echarles sal y esperar unos 10 minutos para que suelten el agua. Después hay que escurrir las berenjenas y secarlas con papel de cocina para que no les quede agua.
Ahora viene el paso mecanicista; Coge platos -uno para el huevo batido y otro para la harina- y se pasa la berenjena por harina y, seguidamente, por huevo batido; de este modo, conseguirás que el rebozado sea más consistente. Asimismo, si quieres, puedes luego pasarlas también por pan rallado, aunque es opcional. Pues así continuamente con todas las rodajas de berenjena
Pasamos a los fuegos. En una sartén hay que poner abundante aceite y, cuando esté bien caliente, empieza a freír las berenjenas rebozadas. ¿El punto? ahí viene la parte complicada, cuando creas que estén doradas, vamos que a ojo chicos, no hay más misterio.
Por último, deja escurrir las berenjenas rebozadas sobre un papel de cocina para que absorba el aceite sobrante.
Y ¡ya está!, espero que no os compliquéis mucho y cuidado con el aceite que quema.
BON APETTITE!
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